La naturaleza nos ofrece muchos productos con propiedades increíbles que pueden solucionar muchos problemas de salud y mejorar las funciones del organismo. Uno de estos elementos es el anís, veamos cuáles son sus propiedades y cómo se puede utilizar en la cocina como remedio natural.
¿Qué es el anís?
El anís es una planta oriental ancestral cuyos orígenes son bastante remotos. Cuando hablamos de anís nos viene a la mente el anís estrellado, de hecho la planta toma su nombre de la flor con la característica forma de estrella de ocho puntas.
Tiene un sabor fuerte y distintivo, similar al del hinojo con el que el anetol comparte un compuesto aromático primario y un ligero sabor a menta.
Propiedades y beneficios del anís
El anís es una de esas plantas que tiene muchas propiedades, entre estas podemos decir que es un digestivo potente y eficaz recomendado sobre todo después de las comidas.
Desinfectante natural que también puede combatir los problemas de mal aliento, provocados en algunos casos por la presencia de bacterias en el interior de la cavidad bucal.
También se puede utilizar para la limpieza de la piel porque además de ser desinfectante tiene un efecto limpiador y antisebo, indicado para pieles que necesitan una limpieza más profunda y que tienen una sobreproducción de sebo que tiende a engordar la piel. causando muchas imperfecciones como puntos negros o granos.
Un gran aliado para la piel pero también para el cuerpo gracias a sus propiedades antioxidantes que ayudan a todo el organismo a contrarrestar el envejecimiento.
En muchos sitios se sabe que se encuentra la redacción » anticancerígeno «, nos gustaría aclarar que no se ha demostrado que algunos alimentos puedan prevenir o combatir los tumores de alguna manera. Se recomienda tomar anís para obtener otros beneficios.
Anís en la cocina
Como hemos visto, existen muchas propiedades del anís, se puede tomar de varias formas.
Uno de ellos es su uso como especia para dar sabor a los platos dándole un toque más refinado. No es casualidad que existan licores propios aromatizados con Anís que también se pueden elaborar en casa.
Además, usar anís en recetas es una forma más divertida de tomar una sustancia tan llena de beneficios. Por ejemplo, puede agregar anís a la mezcla de pasteles y galletas, así como condimentar los postres.
pero ahora llegamos al uso del anís en la forma más pura y sin duda la más eficaz: infusiones , infusiones.
Para una infusión basta con poner las semillas de anís en infusión durante unos minutos en agua hirviendo, quizás junto con una infusión de manzanilla o alguna otra hierba medicinal como malva, salvia o romero para aumentar el efecto calmante y desinfectante. De 2 a 5 gramos de semillas son suficientes para satisfacer su gusto.
Además, beberlo en forma de infusión alivia los síntomas de resfriados y dolores de garganta con una auténtica acción antiséptica.
Entre otras cosas, las infusiones de anís son útiles y también se recomiendan para aliviar el asma; de hecho, la planta también parece tener un poder calmante incluso para algunas formas de asma.
En definitiva, el anís estrellado parece tener mil recursos y a diferencia de muchas otras plantas de este género parece no tener contraindicaciones y efectos secundarios particulares, pero es necesario recordar no excederse en el uso y en el caso de que las náuseas y dolores intestinales o cualquier otro síntoma es suspender su uso.
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