Cada vez más personas deciden confiar en el poder de las dietas consideradas «milagrosas» para perder los kilos de más. Entre las diversas dietas, una de las más drásticas pero efectivas es la brasileña.
La dieta brasileña se basa en el supuesto de consumir fundamentalmente frutas y verduras cuyo consumo debe distribuirse entre las cinco principales comidas diarias . La característica de esta dieta radica en el hecho de poder limitar el consumo de grasas permitiendo así una pérdida de peso más rápida. Esta posibilidad es posible gracias al alto contenido en vitaminas presente en frutas y verduras gracias a las cuales es posible eliminar el exceso de líquidos, favoreciendo una excelente acción de drenaje. Esta dieta es especialmente indicada para aquellos que quieren perder mucho peso en poco tiempo y no es recomendable para aquellos que ya tienen un cuerpo bastante delgado ya que solo debilitaría su físico.
Por eso se ha dicho que la dieta brasileña consiste sobre todo en el consumo de frutas y verduras tratando de limitar al mínimo la ingesta de carbohidratos complejos y obviamente grasas. Otro rasgo es la puntualidad con la que se deben consumir las comidas; de hecho es muy importante seguir un horario muy preciso para acostumbrar a tu cuerpo a seguir una dieta saludable.
¿Cómo seguir eficazmente la dieta brasileña?
Por tanto, se ha dicho que esta dieta es particularmente drástica y podría causar algunas molestias en quienes no están predispuestos a su potencia. En primer lugar es necesario ser seguido por un especialista que sea capaz de aportar la información adecuada sobre esta dieta y sobre todo realizar los controles médicos oportunos al paciente para valorar si puede o no realizar esta dieta.
Otra prerrogativa de esta dieta es, como se mencionó anteriormente, la referencia a un horario fijo y no sujeto a cambios. Pero ¿qué significa esto? Para que esta dieta produzca los resultados adecuados, es fundamental que organices tus comidas dentro de un horario, dedicando el tiempo adecuado a cada comida. Evitar comer demasiado tarde es, por ejemplo, una de las reglas principales ya que de lo contrario te acostarías sin haber digerido completamente la comida. Lo mismo ocurre con el desayuno y la merienda; si logras darle regularidad a tu rutina, solo beneficiará a tu cuerpo.
La dieta se puede llevar a cabo durante un máximo de 4 semanas y el consejo que la mayoría de expertos dan a quienes la emprenden es seguir la dieta durante dos semanas, detenerla unos días y reanudarla durante otras dos semanas. De esta forma el metabolismo se mantendrá siempre en movimiento y será posible acelerar su acción.
Por lo que esta dieta te permite comer varias veces al día o permitir que el cuerpo alcance sus necesidades diarias sin cansarse de alimentos poco saludables.
Contraindicaciones
Obviamente, como todos los esquemas dietéticos que son demasiado rígidos, incluso la dieta brasileña podría tener efectos negativos en el cuerpo. El hecho de que esta dieta se base en el consumo exclusivo de frutas y verduras impide que el organismo asimile otros factores nutricionales fundamentales. Las proteínas y los carbohidratos, poco presentes en esta dieta, son esenciales para la formación de músculo y para el aporte de energía al organismo y por tanto no pueden eliminarse de la dieta durante demasiado tiempo.
Por lo tanto, está claro que esta dieta puede ayudar al cuerpo a limpiarse de impurezas y alimentos dañinos, pero no debe tomarse con un estilo de vida regular y estable.
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